Adopción
Una película de David Lipszyc
Fecha de estreno: 25 de Febrero de 2010
Cine Gaumont
Calificación: SAM 13 años
Duración: 69 minutos
24º festival Internacional de Cine de Mar del Plata
31º Festival internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de la Habana
Sinopsis
Ricardo, que vive una relación homosexual con su pareja, adopta a Juan, un chico nacido en 1976. Si bien el niño se integra al nuevo hogar, Juan continúa padeciendo los miedos del pasado. Ricardo cree conveniente que su hijo conozca sus raíces e inicia la búsqueda de su identidad, descubriendo que la verdadera historia es diferente a la escrita en el legajo de juan.
Ésta irá apareciendo como la punta del iceberg en un mar helado.
Ficha Artística
Ignacio Monná
Ricardo González
Franco Gross
José María Regueira
María Susana de Señas
Ficha Técnica
Dirección: David Lipszyc
Guión: David Lypszyc, Alejandra Bruno
Fotografía: Pablo González
Edición: Mónica Gómez
Dirección de Arte: Mariana Sosa
Sonido: Pablo Sala
Música: Pablo Sala
Producción: Néstor Sánchez Sotelo
Argentina, 2009 / 69´/ 35 mm / Color / Español
Acerca del director: David Lipszyck
Nacido en Argentina, además de director trabaja como guionista y productor. Realizó los largometrajes:
Volver (1982) ganadora del premio “Nuevos Directores” del Festival Internacional de Cine de San Sebastián. Con Guión de Aída Bortnik y música de Astor Piazzolla.
La Rosales (1984) con Héctor Alterio, Alicia Bruzzo, Ricardo Darín, Oscar Martínez, Ulises Dumont, Soledad Silveyra, Marta Bianchi)
El Astillero (2000). Adaptación de Ricardo Piglia de la novela homónima de Juan Carlos Onetti
Notas de Producción
La adopción, esa determinación íntima, emocional y jurídica cuyos sentimientos, necesidades afectivas y temerosas elecciones han sido motivo de tantas películas, se manifiesta con toda plenitud en este arriesgado e intenso film de David Lipszyc.
La historia empieza por el auténtico comienzo; es decir, por el niño en el orfanato, las sesiones y encuentros con la persona (un hombre soltero) que desea cumplir con ese acto de humanidad y esperanza que es la adopción; porque él desborda cariño y necesita imperiosamente darlo. El desarrollo avanza de inmediato pues los matices argumentales comienzan prontamente a (des) cubrir situaciones coherentes y a la vez inesperadas, mientras que el espectador se siente partícipe protagónico de búsquedas, secretos, confesiones, inquietudes, historias ajenas… Y porque desgraciadamente forma parte de nuestra reciente Historia, ingresa también en los dramáticos momentos por los que pasó nuestro país hace treinta y tantos años. Es una película necesariamente dura, cuyo final, aquéllos que no advirtieron todos los matices del futuro posible de esos personajes, pueden considerarlo feliz.